Habitualmente suele enseñarse a los más chicos a andar en bicicleta con dos métodos: las tradicionales “rueditas” y corriendo tras ellos con la mano en el asiento. Ambos métodos pecan de lo mismo.
❌ En el caso de las rueditas estabilizadoras el pequeño realmente no aprende a andar en bicicleta sino a andar en un triciclo rudimentario, y del equilibrio, que es lo único que tiene que aprender… nada.
❌ En el segundo caso, nuestra mano estabilizadora le impide al niño descubrir el “secreto” del equilibrio.
Por eso este método permite que el niño haga el “click” del equilibrio sin fracasar en el intento:
1 Las primeras clases podemos dárselas en un parque. Elegiremos un camino llano y tranquilo. Quitaremos los pedales de la bicicleta. El niño debe poder tocar el suelo con la punta de los pies. Antes de que empiece a moverse le enseñaremos como funcionan los frenos.
2 Primero enseñaremos al niño a impulsar la bici con sus pies. Una vez que comience a moverse dejaremos que tome algo de práctica antes de pasar a la siguiente lección. Al principio este tipo de movimiento debe realizarse en una superficie llana.
3 Una vez que el niño tome confianza pasaremos a un tramo en ligera bajada. La pendiente ayudará al niño a espaciar cada vez más los apoyos. Una vez que consiga deslizarse sin poner los pies en el suelo, habrá aprendido a controlar el equilibrio.
4 Colocar nuevamente los pedales. Si el niño ya ha aprendido a pedalear (con el triciclo o la bici de rueditas), ahora le toca aprender a mantener el equilibrio y pedalear al mismo tiempo.
5 Recordar al niño cómo se usan los frenos. Pronto empezará a tomar velocidad y andar en bici se convertirá en algo instintivo. Pero también llegará el momento en que será necesario frenar.
Consejos
👉Los niños siempre deben llevar casco para iniciarse.
👉Andar en bici debe ser algo divertido, de modo que es mejor hacer sesiones cortas y descansos frecuentes.
Fuente: Biciclub.com